jueves, 26 de marzo de 2009

Advertencia, es mi segundo nombre

Hoy cuando abrí los ojos, como todas las mañanas me dirigí a la cafetera, me serví un rico desayuno, saqué las galletitas me senté en la mesa, todo iba bien, hasta que de repente tomé el diario y paf, ya ver a nuestra honorable presidenta en la portada me resultó bastante desagradable, supuse que mi ira desenfrenada hacia nuestros gobernantes estaba por despertar, y no me equivoqué.

Resulta que siempre vivo viendo y leyendo que nuestra máxima autoridad se la pasa "advirtiendo", advierte a los docentes que den clases porque les descontará los días, advierte que no suban los precios de los lacteos, advierte que no corten las rutas, y yo digo..¿Por qué en vez de advertir no hace algo más productivo?, yo también sé advertir, no saben lo bien que lo hago, podría ser presidente ya mismo.

A ver si me explico señora presidenta! Nosotros le pagamos su sueldo, sus operaciones, sus lujos, sus carteras Channel, sus trajes Versace y hasta la Universidad de Harvard para su hija, con el fin de que Ud. Haga algo para la sociedad, para que actúe, no queremos una cara bonita en el gobierno, no queremos ser cholulos y que digan "que fina es la presidenta de Argentina", ¿todavía no lo entiende? queremos comer, trabajar, vivir dignamente, poder salir a la calle!!!.

Yo me pregunto si no les da la cabeza para hacer algo o si no quieren hacerlo. Últimamente me estuve inclinando por lo primero, viendo que en alguna que otra oportunidad nuestros dirigentes actuaron, proponiendo por ejemplo, que nos pongamos de acuerdo para ir al trabajo, que hagamos reuniones "vecinales" preguntando, "che,...¿alguien trabaja por Palermo? así nos vamos juntos, compartimos los gastos del auto y nos ahorramos los peajes de castigo por ir sólos a nuestro trabajo, o el coqueto plan para que las automotrices no despidan empleados, obligando a las empresas a bajar $1000 por automóvil, sin tocar un sólo peso del IVA, sellados, patentamiento, altas, etc. ¡Qué plan brillante!.

Aunque después me replanteo, si son tan ignorantes ¿cómo se las ingenian para robarnos tanto? ¿cómo hacen para inventar todos esos impuestos que pagamos sin chistar? viéndolo así son brillantes, entonces concluyendo, de ignorantes no tienen un pelo, a la hora de cuidar sus intereses (nuestro dinero) son eruditos, y mientras no hagamos nada, seguiremos así por siempre, es una desgracia que seguirá en pie con una sociedad resignada.

2 comentarios: